domingo, 15 de septiembre de 2013

Deja de Pensarla y Vívela

Cuantas personas se acercan constantemente con la misma pregunta "¿cómo puedo dejar de pensar tanto? La respuesta se encuentra en que muchas veces nos hemos acostumbrado a pensar la vida y no a vivirla, nos sumergimos en nuestros pensamientos sobre nuestra vida y nos olvidamos de vivirla.

Vivirla tiene un componente de riesgo que no se encuentra en los meros pensamientos, porque en estos las personas se convierten en un simple observador, como si fueran una tercera persona viéndose que puede eliminar sus emociones racionalizándolos y convirtiéndolos en simples pensamientos que son controlados por la mente.

Otra gran mentira "la mente controla todo", es imposible controlar por la razón algo que es carente de razón, como son las emociones. Al pensar las emociones nos hemos cada vez alejado de nuestra vida y la hemos empezamos a ver desde una vidriera.

La solución es correr el riesgo de aprender a vivir tus emociones y descubrirlas, ellas tienen mayor sabiduría que toda la biblioteca de Alejandría en tu cabeza, date el permiso de descubrirlas y vívelas.

Con el tiempo experimentaras la maravilla de vivir la vida y no pensarla, los pensamientos no serán intromisiones a gran velocidad, sino soportes a tu intuición y tu libertad.

La vida se vive y descubre desde lo corporalidad, no dejes de lado tus afectos o perderás algo tan valioso como es tu misma vida.


JUAN PABLO DÍAZ DEL CASTILLO B.

Bogotá septiembre 2013

2 comentarios:

Unknown dijo...

Es así!! :)

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.